La herencia judía ha dejado una marca profunda en España a lo largo de los siglos. Conocida como Sefarad, nombre que los judíos dieron a la Península Ibérica, esta rica trama cultural perdura hoy en día, siendo testigo de ello las ciudades de la Red de Juderías. A continuación, exploramos algunas de estas ciudades.
**En dirección al noroeste**
La esquina noroccidental de España conserva la herencia sefardí en lugares como Ribadavia, donde pasear por su judería es un viaje en el tiempo. Calles estrechas revelan detalles sefardíes en cada paso: estrellas de David en fachadas, menorás, etc. En Tui, la sinagoga, la Casa de Salomón, la menorá de la Catedral y los Sambenitos del Museo Diocesano son imperdibles. Monforte de Lemos destaca por su pasado medieval, desde las estrellas de David en la Torre del Homenaje hasta las antiguas viviendas en calles como Falagueira, Zapaterías o Pescaderías. En León, el Puente Castro y el Barrio Húmedo, que se extiende por lo que fue la segunda judería, son puntos destacados.
**En la frontera con Portugal**
Como tierra de frontera, la herencia judía es rica en Cáceres y Salamanca. En Cáceres, el barrio de San Antón y los alrededores de la Plaza Mayor resuenan con el pasado judío. En Plasencia, el Palacio Carvajal Girón se erige en el sitio donde se construyó la Sinagoga Nueva. Hervás presenta una judería bien conservada, como se evidencia al recorrer la calle Rabilero. Béjar alberga el Museo Judío David Melul, una visita obligada.
**Recorrido por Andalucía**
Lucena, la Perla de Sefarad, fue la única ciudad habitada exclusivamente por judíos. Cuenta con la mayor necrópolis judía excavada y mejor conservada de Europa. Córdoba ofrece la sinagoga y la plaza de Tiberiades, con una estatua dedicada a Maimónides. En Jaén, la antigua judería, documentada meticulosamente, incluye la Puerta de Baeza, recordando una menorá gigante.
**Las joyas del Ebro**
El legado sefardí se encuentra en tierras navarras, riojanas y aragonesas. Calahorra, Estella-Lizarra, Tarazona y Tudela destacan en esta ruta por el Ebro. En Tudela, cuna de Benjamín de Tudela, la antigua judería se extendía cerca de la Plaza de los Fueros.
**Por tierras castellanas**
Toledo, la ciudad de las Tres Culturas, alberga un rico legado sefardí, como la Sinagoga de Sofer o la Sinagoga Mayor de Segovia. En Segovia, la iglesia del convento de Corpus Christi fue la Sinagoga Mayor. En Ávila, la judería se ubicaba cerca de las actuales calles de los Reyes Católicos y del Pocillo. No se puede dejar de contemplar el atardecer desde el Jardín de Moshé de León, con la puerta de la Malaventura frente a él.
**El legado del Mediterráneo**
Lorca posee una sinagoga única en el mundo por su conservación y es la única visitable en España que no fue transformada en iglesia. Barcelona preserva su memoria sefardí en el MUHBA El Call. En Sagunto, el Portal de la Judería y el mikvé (baños rituales) son tesoros del legado sefardí en España.